Preparación para el parto de la perra: nuestros consejos

Lo sabes desde hace unas semanas: tu perra está embarazada. Si ha consultado a un veterinario, es posible que tenga una fecha de finalización de la gestación. Esto no es suficiente. Para acompañar mejor a tu mascota, también debes saber reconocer los síntomas que anuncian la llegada de los pequeños. Así, podrás prepararte pero también y sobre todo, preparar a tu perro para este evento.

El embarazo de una perra: todo lo que debes saber

La gestación de una perra dura entre 60 y 70 días. Esta duración varía según la raza. Si tu perra está esperando bebés, no lo notarás durante los primeros días. Entonces el comportamiento de tu mascota cambia. Tu perro busca tu presencia y tu cariño, siempre está a tu lado. Ella también es temerosa y nerviosa. Su cuerpo solo evoluciona tarde, 30 a 45 días después del apareamiento. El perro está ganando peso. Come más y le crece la barriga. A medida que avanza la gestación, tu mascota tenderá a aislarse y dormir. Las ubres serán más voluminosas. A partir del día 45, conviene concertar una cita con un veterinario para asegurarse de que todo va bien pero también para tener una idea más precisa de la fecha de nacimiento. Cabe señalar que las perras casi todas dan a luz de forma independiente. Solo unas pocas razas requieren asistencia médica, como el pequinés o el chihuahua.

¿Cómo saber si el nacimiento está cerca?

Cambios en el apetito

Para saber si la llegada de los más pequeños está cerca hay que estar atentos a varias señales. El primero es el apetito. Su perra que tenía buen apetito come menos. No es raro que en las 24 horas que preceden al nacimiento el animal no coma más. Si es así, no obligues a tu perro a comer. Proporcionar comida, algo fácil de comer. También asegúrese de que tenga agua fresca cerca del lugar elegido para dar a luz. También es posible que tu perro coma más. Esta fase también ocurre en las últimas 24 horas. El animal come mucho más a menudo de lo habitual. Si esto sucede, dele porciones pequeñas regularmente y tan pronto como lo desee.

El cuerpo de la perra está cambiando rápidamente

Cuando la llegada de las crías es inminente, el cuerpo de tu perra cambia visiblemente. Las ubres se hinchan a medida que se produce la lactancia. También notarás que la barriga de tu mascota se ha caído. Cuando el parto está muy cerca, la vulva se dilata. No es raro que tu perro se lama mucho los genitales.

Los signos a tener en cuenta

Antes de la llegada de las crías, la temperatura corporal del animal desciende. Cae 1°C. Esta gota anuncia el nacimiento entre 12 y 24 horas. También es posible que tu perro esté escondido debajo de los muebles o en un rincón. Orina más ya veces vomita. Cuando comienza el parto, la perra no quiere ver a nadie. ¡Ella puede ser agresiva! Por lo tanto, la vigilancia es esencial, especialmente si tiene niños en casa.

un perro saludable

En los días previos al parto, es imprescindible proteger a tu perra, y por tanto a sus crías, de parásitos. ¡Considera desparasitarlo! Al mismo tiempo, dar un tratamiento contra pulgas y garrapatas. Si ha pedido cita con el veterinario, él le aconsejará los tratamientos a preferir. También asegúrese de que su perro siempre tenga agua fresca y suficiente para comer. Sus comidas deben ser balanceadas porque sus necesidades aumentan durante la gestación.

Cree un espacio tranquilo y seguro para el parto

Para recibir a sus pequeños, tu perra demostrará una gran autonomía. Si ella está buscando tu presencia, necesita ayuda. Los días previos al parto, tu perra se aislará. Si es siempre en el mismo lugar, es necesario disponer este espacio. ¡Es el que ella eligió! Asegúrese de que este lugar sea seguro y tranquilo. Proteja el espacio de corrientes de aire. Para recibir a sus pequeños, tu perra necesitará:

  • una caja de entrega grande en la que puede acostarse cómodamente y luego cuidar a los más pequeños,
  • periódicos, cubrecolchones y mantas para proteger la jaula y convertirla en un cómodo nido,
  • un cuenco de agua y comida cerca.

La caja de entrega debe estar lista unos días antes de la llegada de los más pequeños. Anime a su perro a descansar allí. Así sabrás si se siente cómoda con la instalación y sobre todo si es lo suficientemente grande. También es esencial poder limpiar fácilmente esta caja.

Eliminar las fuentes de molestia

El nacimiento está cerca, tal vez ha comenzado. En este caso, todas las fuentes de molestia deben ser erradicadas. Si tienes otros animales, debes mantenerlos alejados. Lo mismo ocurre con los niños pequeños. Recuerda también cerrar puertas y ventanas, y apagar la televisión, la radio y cualquier otra fuente de ruido.

Prepárese cuando sea necesario

Normalmente, su perra podrá mostrar autonomía. Sin embargo, ella puede necesitar algo de ayuda. Este suele ser el caso durante el primer parto. Mantente a su disposición y colócate a la distancia que ella acepta. Preparar:

  • unas tijeras desinfectadas y Betadine (o equivalente) para cortar el cordón si la perra no puede hacerlo,
  • una solución desinfectante para tus manos,
  • toallas de felpa viejas para limpiar a los cachorros si es necesario,
  • mantas y protectores de repuesto.

En caso de algún problema, contacta con un veterinario que podrá aconsejarte o que acudirá a ti si es necesario.