¿Cómo elegir la correa para tu perro?

Accesorio imprescindible para pasear a tu perro con seguridad, la correa también es obligatoria en determinados lugares públicos. Dado su papel crucial, su elección no debe hacerse al azar.

La longitud correcta

La primera regla para elegir la correa es optar por la longitud adecuada que debe adaptarse al tamaño del animal. Si tu perro es fuerte y pesado, necesitarás absolutamente una correa ancha y corta que le facilite sus paseos diarios. El tamaño ideal es de alrededor de 1,20 ma 2 m. Porque cuando es demasiado corto, este accesorio «aprisionará» al perro impidiéndole realizar movimientos libres. Por otro lado, las correas retráctiles demasiado largas no son recomendables para estos perros grandes que pesen más de 10 kg, especialmente cuando pasean por la ciudad, ya que será difícil controlar al animal si decide echarse a correr de repente. Estos modelos tampoco son adecuados para enseñar a su perro a caminar con correa. En cambio, si el perro es pequeño y si los paseos se realizan en el campo, en un parque u otro lugar sin riesgo, la correa retráctil es posible. Otra posible elección es la correa de lazo que tiene la ventaja de no marcar el cuello y evitar dañar el cabello. Sin embargo, no se adapta a perros que tiran durante los paseos, ya que tiende a estrangularse. Este modelo se utiliza principalmente durante las exposiciones caninas.

Una amplia gama de modelos de correa

Una vez elegida la longitud, es el momento de hacer balance del material. Tienes tres opciones. El más clásico es el modelo de nylon que también es el más asequible en cuanto a coste. En el mercado encontrarás una amplia gama de modelos diferentes. Pero tenga cuidado de elegir el material con cuidado. Debe ser cómoda al tacto, ya que si el perro tira mucho corres el riesgo de sentir escozor en la mano, si tienes un presupuesto más elevado es mejor apostar por correas de cuero auténtico. No se recomiendan las imitaciones y otros equivalentes, porque el perro corre el riesgo de dañarlos muy rápidamente al morder el accesorio. La ventaja del cuero es que es extremadamente resistente y ofrece mayor comodidad al tacto. Este no es realmente el caso de las correas de metal que no son cómodas de sujetar para el amo y menos agradables de llevar para el perro. Aunque son fuertes, estos modelos son pesados ​​para tu mascota. Es por eso que deben usarse temporalmente. Están especialmente recomendados para perros que tienden a morder la correa y degradarla demasiado rápido. Para evitar este tipo de comportamientos, es necesario educar al animal para que respete el objeto y hacerle entender que no es un juguete.Por el lado del color, todo depende de tus gustos y deseos. Sin embargo, los especialistas aconsejan usar una correa de colores llamativos para que las personas puedan detectarlo por la noche y no tropezarse con él.