Al igual que los humanos, todos los perros tienen su propio carácter. Y si algunos pueden ser dóciles, otros tienen un carácter fuerte. A menudo denominados erróneamente perros «dominantes», le hacen pasar un mal rato a su amo con su lado «terco». Luego se enfrentará a problemas de comportamiento a lo largo de su educación. Algunos humanos incluso terminan rindiéndose y dándose por vencidos. Para evitarlo, te ofrecemos nuestros trucos y consejos para el manejo de un perro con carácter fuerte.
¿Qué es un perro con un carácter fuerte?
El término «perro de temperamento fuerte» se usa a menudo por una buena razón. Este término a veces se usa para describir perros agresivos, mordedores, ladrones, destructivos o incluso fugitivos. Sin embargo, estos no son rasgos de carácter, sino problemas de comportamiento generalmente debido a la falta de educación. Un perro no es naturalmente vicioso, aunque puede ser difícil de seguir. El elemento principal del carácter de un perro es su raza. Esto puede estar influenciado por su experiencia, pero también por su educación. Muy a menudo, los perros con un carácter fuerte están dotados de una gran inteligencia. No dude en utilizar su habilidad para educarlos bien.
Nuestros consejos para manejar un perro con un carácter fuerte
Consejo número 1: sé paciente
La paciencia será tu mejor arma para criar un perro con un carácter fuerte. Normalmente, aprender a manejar a tu perro lleva tiempo, pero cuando tiene un carácter fuerte, es un proceso largo. Nunca debes desanimarte, incluso si tu perro intenta desgastarte. Es inteligente y sabe que si te rindes una vez, podrías volver a hacerlo. Depende de usted ser persistente para que su perro no tome el control.
Consejo número 2: adopte un entorno de vida estricto
Cuando te enfrentas a un perro con un carácter fuerte, nunca debes ceder. Él sabrá explotar el más mínimo defecto de tu parte y hará todo lo posible para hacerte la vida difícil. Por lo tanto, debes ser firme y nunca dejar que tu perro crea que ha logrado tenerte. Lo que le está prohibido debe permanecer siempre así. Por ejemplo, si a su perro no se le permite subirse al sofá, no puede permitir que se haga a un lado ni una sola vez. ¡Así que no debería unirse a ti en el sofá viendo tu película del domingo por la noche! Si cedes, ahora estará en su mente que puede ir al sofá cuando quiera. Corregir este mal comportamiento será difícil. En resumen, sea estricto y consistente, nunca retroceda.
Consejo número 3: nunca seas agresivo
La agresividad, y por extensión la violencia, son contraproducentes frente a un perro de carácter fuerte. Indudablemente lograrás «domarlo», pero te expones a rebeliones igualmente violentas, si no más. De hecho, un perro que te tiene miedo no se sentirá bien consigo mismo y es probable que desarrolle agresión. Tu perro se convierte entonces en un riesgo para ti, para quienes te rodean, pero también para las personas y los animales con los que se cruzará.
Consejo número 4: sé amable
Un perro con un carácter fuerte sin duda te llevará al límite. Sin embargo, siempre debes permanecer benevolente, pase lo que pase. El entrenamiento positivo da excelentes resultados y construye una relación de confianza con tu perro. Cuando tenga un buen comportamiento, porque ejecuta correctamente un ejercicio o una orden por ejemplo, felicítelo calurosamente. Puedes acompañar los piropos con caricias sin moderación, y por qué no algunas golosinas, pero siempre con moderación. Y si tu perro se comporta de forma inadecuada, mándalo a la cesta, aíslalo o ignóralo. Es tan simple como eso. Con el tiempo, comprenderá que el buen comportamiento puede ser bien recompensado, mientras que el mal comportamiento no le reporta ningún beneficio.
Consejo número 6: ejercicio
Un perro necesita esforzarse para sentirse bien en sus almohadillas. La falta de ejercicio puede derivar en problemas de comportamiento como la rotura de zapatillas, ladridos excesivos, inquietud motora y nerviosa, etc. Además, sepa que un perro cuyas necesidades de ejercicio físico están cubiertas, es mucho más fácil de educar. Tiene sentido, si no se aburre, si exterioriza su energía, es más fácil que se centre en tus demandas educativas.
Consejo número 7: socializa a tu perro
Un perro con carácter fuerte se detecta con bastante rapidez, y aunque es más difícil de manejar, no se debe descuidar la socialización. Es una etapa imprescindible en la vida de todo perro: de ella depende su equilibrio psicológico. Cuando le das la bienvenida a las ocho semanas, te queda un mes para completar esta fase. Debes hacerle descubrir un máximo de nuevos lugares, sensaciones, olores. También aumentará las interacciones con su entorno y los encuentros positivos con sus congéneres y con los humanos. Un perro equilibrado acostumbrado a lo «desconocido» es mucho más fácil de manejar, incluso si tiene un carácter fuerte.
Consejo número 8: juega con él
El juego es un aliado valioso para ganarse la confianza de su perro. Incluso si su perro tiene un temperamento fuerte, es más fácil educarlo desarrollando un verdadero vínculo amo/perro. Además de crear un vínculo entre vosotros, los juegos tienen otras ventajas. De hecho, pueden ser educativos y divertidos. Permiten que tu perro se ejercite y canalice así su energía.
Consejo número 9: el entrenador de perros
Uno puede sentirse abrumado rápidamente por un perro con un carácter fuerte, no hay vergüenza en tenerlo. Puede buscar ayuda externa, y el entrenador de perros está ahí para eso. Él podrá ofrecerte las claves para gestionar mejor a tu acompañante. Tanto si eres un adiestrador experimentado como si no, no esperes que tu perro te abrume por completo. El adiestrador canino no debe ser el último recurso, sino un asistente durante toda la fase de aprendizaje. No dude !