Si tu perro no tiene ningún problema de salud, el gasto número 1 de tu mascota es sin duda su alimentación. Pero, ¿cuánto cuesta exactamente? Tenga en cuenta que el presupuesto anual promedio de los franceses para la comida de su perro ronda los 500 euros. Pero esta cantidad esconde grandes disparidades, dependiendo principalmente del peso de tu perro y del alimento elegido.
Presupuesto para la comida de tu perro según su raza
La raza de tu perro tiene un impacto directo en tu presupuesto alimentario. Es obvio que un chihuahua no tiene las mismas necesidades nutricionales que un terranova. El primero pesa como máximo 3 kilos cuando el otro tiene una media de 68 en la edad adulta. Y cuanto más grande es tu perro, más pesa, más come, es mecánico e imprescindible para el buen funcionamiento de su metabolismo. Así, si tomamos el ejemplo de nuestros perros Chihuahua y Terranova, el primero se satisface con unos 40 gramos de croqueta al día cuando el segundo requiere 1 kilo. Por lo tanto, podemos considerar que su presupuesto de comida para Médor depende en gran medida de su raza, los costos pueden entre dos extremos multiplicarse por 30. Por lo tanto, es muy importante elegir a su perro de acuerdo con sus posibilidades económicas y tener en cuenta que un perro grande cuesta más que uno pequeño en términos de comida.
¿Qué presupuesto para la alimentación de su perro según el alimento elegido?
Hay muchas opciones disponibles para alimentar a tu perro de forma equilibrada. Dependen de tu tiempo, tu presupuesto, tus hábitos. Ninguno es mejor que otro, siempre y cuando satisfagan las necesidades de tu perro y mantengan su salud.
Lo más barato: croquetas
La comida para perros es la alternativa más económica para alimentar a tu perro y cubrir sus necesidades nutricionales. Será necesario asegurarse de dejar a su disposición permanente un cuenco grande con agua fresca, pues las croquetas son secas por naturaleza. Entre las marcas de supermercado de primer precio, las croquetas premium disponibles en ciertas webs especializadas y la comida seca que te ofrece tu veterinario, no es fácil orientarse. El precio de las croquetas puede variar por kilo desde simple hasta diez veces, cuente entre 1 euro y 10 euros el kilo. Por el bienestar de tu animal, evita las marcas de primer precio, que contienen carne de poca calidad y mucha grasa. Sin duda son menos costosos, pero se necesita más para saciar a tu perro, y no contribuyen a su buena salud. Para obtener unas croquetas de calidad a un menor coste, plantéate las llamadas croquetas sin cereales, que contienen mucha proteína animal, ingredientes naturales y muy pocos aditivos alimentarios. Muchas marcas «grain free» existen hoy en el mercado a un precio medio por kilo de 4 euros. Para reducir el presupuesto, las bolsas grandes de croquetas pueden reducir a la mitad el precio por kilo. Además, bien cerrada y protegida de la humedad, tu bolsita de croquetas se conservará sin problema durante varios meses, conservando sus cualidades nutritivas. Tenga cuidado de todos modos, si su veterinario descubre un problema en su perro, como diabetes o insuficiencia renal, será importante introducir una dieta adaptada a su patología.
El intermediario: la comida húmeda
La comida húmeda también se adapta bien a su perro, pero un poco más cara, sobre todo porque las raciones que se le dan son más grandes debido a la alta humedad. Entre raciones individuales, sobres frescos, bandejas o latas grandes, la comida húmeda para perros se parece tanto a la jungla como a las croquetas. Pero aquí, tu elección dependerá principalmente del tamaño de tu animal. De hecho, una vez abiertos, los alimentos húmedos se pueden conservar como máximo dos días en el frigorífico. ¡No hace falta que te lleves una caja de un kilo de puré si eres el orgulloso propietario de un Yorkshire! Cuente aquí entre 4 y 12 euros el kilo de comida húmeda, con una media que ronda los 6 euros el kilo. Por supuesto, cuanto más pequeñas y divisibles sean las porciones, mayor será el precio por kilo. Al igual que con las croquetas, tendrás que estar especialmente atento a la composición y preferir un máximo de carne fresca, al menos un 50%. El debate entre croquetas y alimentos húmedos está lejos de ser resuelto por veterinarios y científicos, no dude en jugar con la alternancia, por ejemplo, con croquetas durante el día y puré por la noche. Esto le permitirá moderar los costos mientras hace feliz a su perro.
El equilibrado: raciones caseras
Al contrario de lo que se pueda pensar, cocinar tú mismo a tu perro no cuesta menos. Incluso con la carne a 8 euros el kilo, entre el tiempo de preparación y la energía con la que se cocina la comida, la comida casera sale más cara que las croquetas o los patés industriales. Además, debes estar especialmente atento a la composición de tus platos, teniendo en cuenta 1/3 de proteínas, 1/3 de cereales y 1/3 de verduras y frutas. Las vísceras o el hígado también son fundamentales para crear raciones caseras adaptadas a las necesidades específicas de tu perro. Le aconsejamos que sea asistido por su criador y/o su veterinario si desea optar por la alimentación casera. Él te dará consejos esenciales para una dieta equilibrada por un lado, y tu veterinario podrá comprobar que esta dieta es adecuada para tu perro por otro lado. Para abaratar costes, es fundamental preparar raciones caseras en grandes cantidades y congelar las porciones correspondientes justo a las necesidades de tu amigo de cuatro patas para que nunca se quede sin comida. Ojo, no le des a tu perro la misma comida que a ti, no tiene las mismas necesidades que su humano y algunos alimentos son francamente peligrosos para su salud. Además, dar las sobras tenderá a crear un exceso de peso con el tiempo.
El más caro: el BARF
El BARF, que proviene del acrónimo inglés que significa “Alimento Crudo Biológicamente Apropiado”, hace referencia a una dieta específica adoptada por ciertos dueños de la gente canina. Consiste en alimentar al perro únicamente con alimentos frescos y crudos, con una mayoría de carne cruda, de acuerdo con la dieta natural del perro, que es ante todo carnívoro. Es, con mucho, la dieta BARF, que es, con mucho, la forma más cara de alimentar a su perro, ya que tendrá que contar con una media de 8 euros por kilo de carne cruda de buena calidad. Súmale a eso el método de conservación de la carne, las idas a la carnicería o al supermercado, y rápidamente entenderás que te costará al menos tres veces más que con las croquetas. Finalmente, BARF presenta riesgos reales para la salud, tanto para tu perro como para ti, ya que puede transmitir parásitos y ciertas bacterias como la salmonella. Es una dieta para madurar con fuerza aguas arriba, y con el acompañamiento de un veterinario. Como habrás entendido, cada modo de alimentación induce a unos costes diferentes para la alimentación de tu perro. El buen compromiso sin duda se sitúa en 5 euros el kilo de media, lo que corresponde a unos 900 euros al año para un labrador adulto.